La piedra de los 12 ángulos es una de las atracciones más populares de la ciudad del Cusco, y su fama se debe a la perfección de su construcción. Se trata de una enorme piedra pulida que encaja a la perfección en cada una de sus esquinas con el resto de las piedras que forman el muro. Esta impresionante obra se encuentra ubicada en la calle Hatun Rumiyoc y la visita a este lugar es gratuita. No es sorpresa que sea uno de los lugares más fotografiados del Cusco.
Los orígenes de las magníficas ruinas del edificio que conocemos como Hatunrumiyoc se remontan a tiempos inmemoriales. Construido con enormes piedras poligonales cortadas y ensambladas con una precisión excepcional, este sitio es una de las estructuras más impresionantes del antiguo Cusco. Sus imponentes paredes esconden una serie de sorpresas, desde la famosa piedra de los 12 ángulos hasta formas de animales locales integradas en la propia estructura.
La calle Hatun Rumiyoc, cuyo nombre en quechua significa “piedra grande”, fue nombrada así en tiempos más recientes, presumiblemente refiriéndose a la famosa piedra de los 12 ángulos en Cusco, Perú, que se encuentra en la pared a mitad de la calle. Este edificio inca, que contiene esta piedra, lleva el nombre de la calle que a su vez lleva el nombre de la piedra. Si la gente de Cusco en el momento de la conquista sabía cómo se llamaba el edificio o quién lo construyó con certeza, desafortunadamente no lo mencionaron, o ningún cronista español les preguntó.
Se dice comúnmente que el edificio era el palacio del Inca Roca, el sexto Sapa Inca que gobernó alrededor de 1350. Sin embargo, también se afirma que el Qoraqora, otro edificio que se encuentra en la plaza, es su palacio. Quizás ambos lo fueron, o quizás el Hatunrumiyoc era el palacio de Sinchi Roca, 100 a 150 años antes. No hay forma de estar seguro de quién lo construyó y cuándo, y, al igual que los incas, hemos empezado a inventar la historia de la piedra de los 12 ángulos para nuestros propios fines. Tal vez, contradiciendo los “inventos” modernos de aquellos académicos que tratan de dar sentido a estas cosas hoy en día, uno de los cuentos locales más fabulosos sea cierto. Uno dice que Inca Roca solo reconstruyó la estructura, que había estado en ruinas durante un período de tiempo desconocido, a partir de los ladrillos existentes que encontró dispersos. ¿Quién sabe?
Lo que sí sabemos sobre Hatunrumiyoc es que está exquisitamente construido, alcanzando la misma perfección que muchas otras estructuras incas. Hubo dos estilos principales de construcción utilizados en la arquitectura inca: ladrillos rectangulares alineados y complejos ladrillos poligonales similares a los rompecabezas utilizados aquí y en Sacsayhuamán. Aunque las paredes de ladrillos poligonales se ven más complejas, ¿tal vez fueron más fáciles de tallar y colocar, en su mayoría en la forma natural en que se encontraron? (Los incas no extrajeron piedra, sino que recolectaron de deslizamientos de tierra). Independientemente, este estilo de construcción permitió a los arquitectos incas realizar algunos trucos realmente geniales.
Esta pieza lítica se encuentra en el centro histórico del Cusco, a unos 150 metros de la Plaza de Armas, en la calle Hatun Rumiyoq, cuyo nombre significa “calle con piedras grandes”. Este monumento o palacio data del período incaico, y se estima que fue construido a mediados del siglo XIII para el emperador Inca Rocca.
